El Centro de Educación Infantil Entrepuentes ha dedicado la unidad didáctica del mes de mayo, titulada ‘De la huerta a la cocina’, a fomentar la alimentación saludable y el cuidado del entorno natural. Durante la misma, los niños han conocido cuál es el origen de los alimentos, qué beneficios genera su consumo y cómo es la relación que hay entre las plantas y el medio ambiente. De este modo, los pequeños han aprendido que respetar la naturaleza es proteger aquello que nos alimenta y nos hace crecer sanos y fuertes.
Durante este mes, los menores han practicado la agricultura a pequeña escala en el ‘huerto urbano’ situado en el patio de la Cocina Económica. En primer lugar, han plantado semillas de lentejas en un vaso, para observar los primeros pasos del crecimiento de la planta. Del mismo modo, han aprendido a regar y cuidar los vegetales plantados en la huerta. Finalmente, se han encargado de recolectar las hortalizas ya maduras con sus propias manos.
Ya en el interior del aula, los alumnos han participado en talleres culinarios, cocinando recetas tan divertidas como ratón de tortilla de patata, carita de ensalada rusa, ensalada variada o tomate relleno. También han realizado zumos de frutas de distintos colores, con el fin de percibir el cambio de estado de sólido a liquido. Igualmente, han tenido la oportunidad de manipular alimentos para conocer su textura, color, olor, sabor, dureza y temperatura. En este sentido, una de las actividades más llamativas ha sido convertir una de las aulas del centro en una divertida playa de pan rallado.
Las paredes de la clase han estado decoradas durante todo el mes con imágenes de frutas, con las que los niños han jugado a identificar de qué variedad se trataba. Como siempre, han practicado sus dotes artísticas, elaborando un enorme mural de frutas hecho con pinturas y pintando diversas formas con chocolate.
Fuera del aula, los niños han realizado una visita al Mercado de Abastos para comprar las plantas que han plantado en la huerta. También han jugado a ser improvisados tenderos, metiendo y sacando frutas de cajas de cartón y preparando bandejas con distintas variedades de alimentos.
Los objetivos de esta unidad han sido los siguientes: progresar en la adquisición de hábitos saludables; interesarse por el medio físico y natural; favorecer el conocimiento del cuerpo a través de las sensaciones que percibe al estimular todos sus sentidos; explorar y manipular activamente; adquirir habilidades y destrezas de coordinación viso-manual; crear situaciones de juego placenteras y divertidas para estimular el lenguaje y la interacción entre los niños y los adultos; familiarizarse con distintas texturas y sabores; concienciar a las familias de la importancia de una alimentación variada y equilibrada; conocer el origen de algunos alimentos con la huerta escolar (alubia verde, tomate, lechuga, fresas, etc…); y observar los cambios a los que están sometidos los elementos del entorno.
Por su parte, el aula de bebés (de 4 meses a un año) ha trabajado en mayo la unidad titulada ‘Con mucho arte’.