De forma anónima, en pequeñas o medianas cantidades, los ciudadanos se acercan con frecuencia a Cocina Económica para donar todo tipo de productos, pero en especial de la rica huerta riojana. Cada fruto, por poco que parezca, es fundamental para la entidad logroñesa. Por eso, desde aquí queremos agradecer a todos y cada uno de los donantes su solidaridad con Cocina Económica de Logroño y por ende con sus usuarios y los cinco proyectos que lo componen y que se benefician de ello.

Además, queremos invitaros a acudir a Cocina con los productos que consideréis oportunos para su consumo y que puedan aprovecharse, como esa fruta o verdura que se queda sin recoger en el campo, pero que para esta institución supone un gran apoyo.

En este caso, la donación de calabazas de la fotografía, fue realizada por un grupo de hortelanos de los huertos urbanos situados en El Campillo. ¡Gracias a todos!